Existen diversos factores que determinan el fracaso o éxito de una pyme durante su primer año de vida. Muchos pequeños y medianos negocios echan el cierre en los primeros meses de su andadura por falta de una planificación adecuada en las áreas relacionadas con la gestión comercial o financiera. Tanto en la etapa de lanzamiento como en la de expansión, los gestores deberán tener presente que su supervivencia depende en buena medida de la eficacia y control de todo la contabilidad.
Para evitar que la falta de experiencia en contabilidad acabe con tu negocio te ofrecemos una serie de consejos que te permitirán mantener a flote tu pyme transcurrido su primer año.
Mantén a flote tu pyme con estas siete estrategias de contabilidad
El control de los ingresos y de los gastos, la facturación o cualquier otro asunto relacionado con las finanzas de tu empresa deben convertirse en una prioridad desde el momento en que abres las puertas de tu negocio. Si quieres lograr la eficiencia económica del mismo, lee atentamente estos consejos.
1. Mejora tu sistema de cobro
Una de las formas de perfeccionar el sistema de cobro es ofrecer a tus clientes incentivos, como los descuentos, por realizar los pagos de manera anticipada.
Si el principal problema de tu empresa es que tus clientes se retrasan con los pagos, opta por establecer sanciones como por ejemplo los intereses de mora.
2. Registro diario de las entradas y salidas de capital
En cualquier negocio es preciso saber la liquidez con la que se cuenta en cada momento. La mejor forma de conocer este dato es realizar un registro diario de los movimientos de capital. Si tus libros contables no están actualizados cada vez será más difícil establecer el control sobre la tesorería de tu empresa.
Para saber si tu plan financiero se está cumpliendo deberás comparar el estado de tus cuentas en diferentes períodos de tiempo. De esta forma verás si tu estrategia sigue el camino marcado o no.
3. Detalla de forma minuciosa el inventario
Para ser un buen planificador deberás conocer al detalle todo tu inventario con un registro exhaustivo de todos tus productos. De esta forma sabrás cuáles se venden mejor y cuáles tardan más en salir al mercado. Con esta información podrás establecer estrategias que te permitan mantener el ritmo de ventas de los productos o servicios de alta rotación y mejorar o acelerar la salida de los que tardan más tiempo en llegar a tu cliente.
4. Evita los desembolsos innecesario
La austeridad te impedirá derrochar tu capital en la compra de servicios o productos innecesarios para el buen desarrollo del proceso productivo de tu empresa. Compra solo la materia prima que realmente necesites para operar.
5. Recurre al anticipo de facturas cuando sea preciso
El anticipo de facturas es una buen alternativa para conseguir financiación inmediata. Consiste en ceder los derechos de una factura pendiente de cobro a un tercero para la obtención de liquidez.
6. Invierte en el software adecuado
En el mercado existen numerosos programas que te permitirán llevar la contabilidad de tu empresa de forma eficaz. Establece tus necesidades y elige el software que mejor se adapte a ellas. La inversión valdrá la pena cuando veas que con él ahorrarás tiempo y evitarás problemas relacionados con la falta de experiencia.
7. Traspasa la contabilidad de tu empresa a un experto
Un asesor contable te puede ayudar a gestionar las finanzas de tu empresa en las etapas más delicadas de tu negocio. Supondrá un gasto adicional pero te ayudará a evitar errores con Hacienda o la Seguridad Social, a llevar un control más realista de tu plan de negocio e incluso a decidir en dónde invertir los recursos de los que dispones. Recuerda que el objetivo es mantener a flote tu pyme durante el primer año de vida y la experiencia de un profesional te puede dar la clave de cómo hacerlo.