Esta semana hemos querido dedicar los contenidos de nuestro Blog a uno de los servicios más demandados por la mayor parte de las empresas: el anticipo de facturas.

Dentro de este concepto, existen dos variables de contratación: anticipo de facturas sin recurso y con recurso. Hoy hablaremos de estas últimas.

Recordemos algunos conceptos…

Antes de meternos de lleno en el tema, recordemos brevemente para quien no haya leído los post anteriores la definición de anticipo de facturas.

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¿Porqué las empresas necesitan adelantar el cobro de ciertas facturas?

Para asegurar el funcionamiento normal de su actividad y asegurar tesorería.

Cuando un profesional o empresa presta sus servicios, no puede esperar a que venza el plazo de cobro de la factura para disponer de la liquidez, ya que si esto fuera siempre así, la mayor parte de ellas se verían abocadas al cierre.

El anticipo de facturas surge como herramienta de financiación necesaria para asegurar los flujos de caja propios de cualquier actividad.

Desde Finanzarel, a través de nuestra plataforma digital, ofrecemos este servicio en tiempo real y con un tiempo de respuesta inferior a 24 horas.

¿En qué consiste el anticipo de facturas sin recurso?

Una vez claro el concepto de anticipo de facturas y el motivo por el que las empresas necesitan hacer uso de esta herramienta de financiación, podemos optar por dos alternativas: anticipo de facturas con o sin recurso.

Facturas sin recurso

Se trata de la cesión del derecho de cobro de una factura a un tercero que adelantará el importe de la misma, a cambio de unas condiciones preestablecidas. No requiere la firma de avales ni garantías personales y lo que la diferencia de la modalidad común es que el tercero, asume el riesgo de impago en caso de que ocurra.

Como su propio nombra indica, una vez que el tercero asume el riesgo de la factura y anticipa el dinero, no tendrá derecho a realizar ningún tipo de recurso en caso de impago.

Ventajas del anticipo de facturas sin recurso

Protección frente a insolvencia

Si llegado el vencimiento de la factura, el tercero la presenta al cobro y no lo recibe, será este el que asumirá todo el riesgo de impago. Por el contrario, el cliente que ha recibido el anticipo de la factura, no tendrá que asumir ninguna responsabilidad ni devolver el dinero anticipado.

Mejoran los ratios de balance

Con esta modalidad de anticipo de facturas sin recurso, el saldo de los clientes se convertirá en cobro al contado reduciéndose así los plazos de cobro.

Beneficios fiscales del factoring

Tanto las empresas como los freelances pueden beneficiarse de una serie de ventajas fiscales.

El IVA que se carga en el factoring sin recurso es deducible de la declaración de IVA ya que se identifica como un IVA soportado. Además la parte que corresponde al anticipo de la factura no soporta IVA sino que es la otra parte del coste vinculado a garantías y de gestión de cobro la que la soporta.

Los gastos asociados al factoring se contabilizan como gastos comunes procedentes de la actividad por lo que tanto la empresa como el autónomo, pueden ahorrar en el Impuesto de Sociedades y la declaración de la renta respectivamente.

Otras ventajas serían:

  • No aumenta la deuda del balance de la empresa
  • No afecta a la CIRBE por tanto al riesgo bancario
  • La empresa o inversor que acepte la factura se encargará de todo el procedimiento asumiendo todos los posible riesgos
  • Protección total contra el riesgo de impago o insolvencia

Podemos deducir entonces que el principal beneficiado del anticipo de facturas sin recurso es el cedente de la factura, ya que además de conseguir anticipadamente la liquidez también traspasa el riesgo por impago.

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¿Tiene alguna desventaja el anticipo de facturas sin recurso?

Es lógico pensar que el tipo de interés que tendremos que pagar por el anticipo de nuestra factura será mayor en el caso de facturas sin recurso, ya que la cesión de todo el riesgo de impago lleva implícita una compensación económica.

¿Cuál es la tendencia en España?

En nuestro país, el anticipo de facturas sin recurso es el más comúnmente utilizado. Esto significa que la entidad financiera o inversor en el caso de Finanzarel conocido técnicamente como factor, asume el riesgo de impago del deudor.

El factoring sin recurso logra que la carga de los balances sea inferior, má reducida, al desaparecer la cuenta a deber contra los clientes y la correspondiente prima a la financiación bancaria de los mismos. Esto permite una mejoría de la rentabilidad, en contra de lo que muchos piensan, los balances reducidos son más atractivos  si hablamos en términos financieros.

¿Alguna vez has anticipado alguna factura sin recurso? ¿Ha sido tu experiencia satisfactoria?

Te invitamos a que compartas tu opinión así como nos encantaría resolver cualquier posible duda.

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