Un año más llega la Navidad, y con ella el frío, los adornos navideños, las compras, la lotería y… exacto, ¡la cena de empresa! Tan esperada por algunos y temida por otros, esta fecha señalada supone todo un acontecimiento dentro de la empresa, por lo que es fundamental saber comportarse y no salir mal parado.
En Finanzarel queremos ayudarte a afrontar sin agobios este evento y pasarlo de la forma más airosa, así que atento/a a estos 5 consejos de oro:
1- DRESS CODE
En primer lugar, si no conoces el restaurante el que vais a asistir, tienes dos opciones: preguntar o investigar por Google.
De todos modos, si después de esta búsqueda sigues teniendo dudas, opta por un término medio. No se trata de la gala de los Oscar, pero tampoco de una barbacoa con amigos, así que lo ideal es llevar algo discreto. Recuerda que siempre es mejor quedarse corto que pasarse.
2- DÓNDE SENTARTE Y CON QUIÉN
Llega el momento de ocupar tu asiento en el restaurante y te asalta la duda: ¿Dónde me coloco?
Si el lugar no está asignado previamente, puedes sentarte con los compañeros con los que te lleves mejor y con los que compartas más cosas. En la medida de lo posible, aléjate de tus superiores, eso destensará la situación y la cena te será más llevadera.
3- CONVERSACIÓN CON TUS COMPAÑEROS Y TU JEFE
Es inevitable que entre compañeros de trabajo se hable de trabajo. Aun así, se trata de una buena oportunidad para desconectar un poco y prestarte a conocer aspectos más personales de las vidas de tus compañeros. Si eres tímido/a, deja que otros empiecen la conversación, ya te unirás a ella cuando lo veas oportuno. Sobre todo, evita cualquier conversación comprometida sobre política y religión. Ah, ¡y vigila con los chistes!
En cuanto a tu jefe, no abuses de la confianza, recuerda que aunque el ambiente sea distendido, sigue siendo EL JEFE. No le hables de tu aumento de sueldo, ni de ningún compañero o negociación que tengas en mente, queda terminantemente prohibido.
4- QUÉ COMER
Aprovecha la ocasión para comer bien, pero sin empacharte. Y cuidado con el vino, no conviene mezclar.
Es bien sabido que en las cenas de empresa precisamente no escasea el alcohol, así que tómatelo con calma y no te excedas bebiendo, podría pasarte factura. Puedes empezar con un refresco en lugar de una cerveza y alternar vino y agua durante la cena, para que el alcohol vaya bajando.
5- LA FIESTA POST-CENA
Es probable que, una vez acabe la cena, os animéis a ir a algún sitio a hacer la famosa «última copa», sí, esa que aunque nos empeñemos en llamarla así nunca acaba siéndolo. En este punto de la noche, si has seguido el consejo previo, la decisión más inteligente que puedes tomar es la de quedarte un rato, no hasta cerrar el local. Una retirada a tiempo siempre es una victoria.
En caso de que lleves alguna copa de más y no haya forma de echarte de la pista de baile, recuerda: es probable que tus jefes te estén viendo. Así que vigila, intenta no hacer demasiado el ridículo y sobre todo no te dejes fotografiar en situaciones comprometidas, pues siempre acaban circulando por las redes sociales y eso podría perjudicarte.
Para acabar, lo último que podemos aconsejarte es que te tomes una aspirina antes de ir a dormir y reces para que el lunes a primera hora, cuando lleguen todos los cotilleos de la famosa cena a la oficina, no formes parte de ninguno de ellos. Sigue estos consejos y tendrás más números para conseguirlo.
¡Ánimo!