La planificación financiera es una de las tareas que mayores dolores de cabeza levanta entre los emprendedores. Iniciar un negocio y empezar a vender es un proceso relativamente sencillo. Pero después de un tiempo es probable que tu trabajo crezca a un ritmo mucho mayor que el de tu cuenta bancaria. Para no tener que sufrir esta situación deberás hacerte una serie de preguntas para averiguar el estado de tus finanzas y poder reparar aquellos errores que no dejan crecer a tu empresa.
Conoce el estado financiero de tu empresa con estas 10 preguntas
¿Te gustaría aumentar la rentabilidad de tu negocio pero no sabes cómo hacerlo? Si la respuesta es sí te recomendamos que analices tus finanzas a través de varias preguntas.
1. ¿Cuáles son los recursos de los que dispone mi empresa?
Nos referimos a los activos corrientes: tesorería, deudores comerciales, existencias, etc. Estos permanecen en la empresa menos de un año.
También debes conocer los activos no corrientes: aquellos con una vida útil superior a un año. Nos referimos a las oficinas, el material o los vehículo con los que cuenta una empresa y con los cuales no se consigue liquidez a corto plazo.
2. ¿Qué es lo que debo?
Otra respuesta que deberás tener muy clara es la de los pasivos que tiene tu negocio. Hablamos de nóminas pendientes, deudas, préstamos o impuestos, entre otros.
En ningún caso deberán ser mayores que los activos ya que si se diera esta circunstancia tu empresa entraría en quiebra: las deudas estarían muy por encima de los recursos necesarios para poder pagarlas.
3. ¿Sabes lo que le cuesta a tu empresa producir los bienes o servicios que vende?
Dependiendo de cómo respondas a esta pregunta sabrás si tu empresa es viable o no. Lo será siempre y cuando la suma de las ventas anuales sea superior a la suma de todos los gastos (costes de producción, materiales, alquileres, compras externas, etc).
4. ¿Cuál es el margen bruto?
El margen bruto es el beneficio que obtiene una empresa por la prestación de un servicio o venta de un producto. ¿Cómo se conocer? hallando la diferencia entre el precio de venta (sin IVA) y el coste de se producción.
5. ¿Cuánto dinero le deben a mi empresa?
Es importante saber cuál es el importe de los saldos que aún tenemos por cobrar, ya sean deudas de clientes o las devoluciones de ciertos impuestos. Si conocemos su evolución nos será más fácil saber si tenemos problemas de liquidez o se ha producido una mala gestión de la tesorería.
6. ¿Cuánto le cuestan a tu empresa los retrasos?
Puede suceder que tardemos más tiempo en poner en marcha nuestro negocio debido a retrasos en las licencias o en una reforma mal realizada. Durante el período de parálisis puede que tengamos que hacer un desembolso de dinero con el que no contábamos en un principio.
7. ¿Se han cumplido tus objetivos trimestrales?
Es muy importante que revises tu planificación trimestral de gastos e ingresos. Solo de esta forma sabrás si has cumplido tus objetivos, si has cometido algún error de cálculo o si debes establecer unos nuevos objetivos.
8. ¿Conoces el Break-even?
Es decir, el nivel de ventas a partir del cual dejas de perder dinero. No hay beneficios ni pérdidas pero podrás determinar mejor el precio de tus productos, controlar tus gastos o hacer una estimación de cuál será la rentabilidad de tu negocio en determinadas circunstancias económicas.
9. ¿Sabes cuál es la rentabilidad económica de tu negocio?
También conocido como el rendimiento de todas las inversiones que ha recibido la empresa. ¿De qué se trata? De la relación entre el beneficio (antes de intereses e impuestos) y el activo total del negocio.
10. ¿Y la rentabilidad financiera?
En este caso nos referimos al rendimiento del capital. Se trata de conocer la relación que hay entre el beneficio neto y los fondos propios.