Las navidades están a la vuelta de la esquina y con ellas llega el momento de numerosos compromisos, casi todos gastronómicos, con amigos, familia, y compañeros de trabajo. Es el momento de organizar también la cena de empresa, uno de los eventos de networking interno más relevantes de todo el año.
Si este año te ha tocado organizar este acto, es posible que todavía estés dandole vueltas para saber cuál será la mejor forma de que todo el mundo se sienta satisfecho. La buena noticia es que hoy en día existen múltiples opciones para organizar un evento navideño inolvidable. Veamos algunas de ellas.
¿Por qué es tan importante organizar un evento de empresa en navidad?
Resulta un momento ideal para hacer recuento del año y recibir feedback del capital humano de tu empresa. Es recomendable dejar atrás cualquier rencilla que haya podido surgir entre equipos y potenciar el networking. Quizás haya algún trabajador con el que todavía no has tenido ocasión de hablar y descubras su potencial en este evento.
Además cuando el año llega a su fin, es importante analizar la trayectoria de los últimos doce meses de la compañía, resultados, proyectos, logros, etc, y compartirlos con todos sus miembros. Recordarles los valores de la empresa poniendo el clima laboral como prioritario para una comunicación efectiva. Es hora de mostrar gratitud hacia el esfuerzo e implicación y también de demostrarles que tu empresa es un lugar donde merece la pena trabajar.
Atrévete con un discurso motivacional
Si eres de los que no te cuesta hablar en público y consideras el arte de la motivación como imprescindible para un buen resultado, sin duda, la comida o cena de empresa es el mejor lugar para poner tus habilidades de speaker en práctica. No olvides incluir en tu speech un elogio hacia su trabajo recordando que la unión hace la fuerza y en equipo el resultado suele ser mejor.
¿Cómo romper el hielo en el evento de navidad?
Damos por sentado que a estas alturas ya tienes fijada la fecha del evento en el calendario y probablemente reservado el lugar de celebración. La comida o cena de empresa puede llegar a ser un evento incómodo para aquellas personas tímidas o reservadas con su vida privada. Lo mejor es ponerlo fácil y crear un ambiente distendido desde el primer minuto.
Antes de empezar a darte alguna idea de lo que funciona, vamos a recordar lo que no funciona:
*Mesas asignadas: es mejor no asignar mesas por equipos o departamentos. Ofrece la libertad de que cada uno se siente con quien le plazca.
*El mismo ambiente de siempre: no suele ser buena idea celebrar el evento navideño en el propio lugar de trabajo. En un ambiente distinto las personas también se comportan diferente.
*No organices actividades en las que los trabajadores tengan que participar de forma obligatoria, probablemente habrá muchos dispuestos a hacerlo pero también habrá otros a los que algo así puede resultarles violento y pasar un mal trago.
*Saltarte el networking; evita los eventos en los trabajadores llegan se sientan comen y se van.
Comienza con libertad de movimiento
Es importante que la llegada propicie un ambiente relajado y ameno. Para ello contrata con la instalación una zona aparte de la comida o cena en la que poder tomarse una bebida con algún pincho, y eso sí, evita las sillas por ahora.
Algo que está muy de moda es la instalación de un photocall. Incluye diferentes accesorios divertidos relacionados con la empresa para que los asistentes puedan hacerse fotos y subirlas a la web de la empresa como recuerdo de ese día.
Otra actividad cada vez más frecuente es contratar algún espectáculo que contribuya a relajar el clima y despierte una carcajada o sorpresa en toda la plantilla. De esta forma acudirán a comer o cenar con una actitud más abierta y positiva. Monologuistas, magos, malabares, música en directo, cualquier opción es buena para conseguir este objetivo.
Efecto sorpresa a mitad de la comida o cena
Para que la comida o cena no se haga pesada, es ideal introducir algún elemento que atraiga la atención de los comensales como por ejemplo unos mariachis, un gaiteiro, una entrega de premios sorpresa con toque divertido (premio al más mandón, al más respondón, al que cuenta los chistes más malos, etc)
Remata con algún juego colectivo
Existe muchas alternativas de juego que sin duda despertarán más de una carcajada entre los participantes.
¿Conoces el juego de quién es este bebé?
Consiste en pedirles a los asistentes al evento que traigan una fotografía de cuando eran bebés y los demás por equipos tendrán que activar sus habilidades de suspicacia para identificarlos.
El juego del mentiroso también da muy buen resultado. cada persona tiene que hacer tres declaraciones, dos de ellas falsas y una verdadera. Los miembros de cada equipo tendrán que adivinar mientras se van sumando puntos. Finalmente ganará el equipo que más puntuación obtenga. Además de ser divertido es una excelente manera de conocer aspectos personales de cada uno de los miembros.
Si estás pesando que todas estas ideas sobrepasan tu presupuesto, existen otras alternativas de premiar a los trabajadores en estas fechas sin tener que rascarse el bolsillo. Según una encuesta realizada por Adecco lo que la mayoría de los trabajadores solicitan a sus empresas es mayor flexibilidad horaria que favorezca la conciliación y un aumento de sueldo.
Puedes comenzar por implantar la jornada intensiva en navidades, ofreciendo el día 24 y 31 libres. Sin duda será un gran incentivo motivacional para trabajar durante esas fechas.
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