Las nuevas medidas pactadas por las Comunidades Autónomas y el Gobierno central para tratar de contener la expansión del Coronavirus en nuestro país han reactivado en las empresas el miedo a un nuevo confinamiento de la población. Paralizar la industria y cerrar negocios de forma temporal supondrá para muchos pequeños empresarios el cierre definitivo después del duro golpe recibido en los primeros meses del año. Ante tal escenario, ¿sabes si tu empresa está preparada para afrontar un futuro económico incierto? A través del diagnóstico empresarial podrás conocer la situación real de la misma.

¿En qué consiste el diagnóstico empresarial?

El diagnóstico empresarial permite evaluar las fortalezas y debilidades de un negocio. Con el análisis de las principales áreas de la empresa, el gestor o propietario de la misma podrá establecer planes de actuación concretos para el fortalecimiento de estas.

Recopilar información para reconocer la situación real de la empresa

En cualquier proceso de evaluación, ya sea realizado por un agente externo o por la propia empresa, es preciso recopilar información de cada uno de los departamentos de la misma. Solo así conoceremos cuál es su situación actual y en qué condiciones se encuentra de cara a un futuro incierto. Sus beneficios son muchos, entre ellos están:

  • conocer las áreas del negocio que más importancia tienen para su desarrollo.
  • saber si las expectativas que teníamos en el plan de acción son reales o no.
  • descubrir el grado de madurez de la empresa. Es importante averiguar cuál es nuestra capacidad de respuesta ante los retos del mercado. El objetivo es fortalecer las áreas más débiles y establecer estrategias de lucha contra las amenazas.
  • averiguar dónde y cuáles son los errores de la organización empresarial.

Algunas preguntas clave para realizar un correcto diagnóstico:

  • ¿cuáles son los productos o servicios más rentables para la empresa?
  • ¿cómo responde público objetivo ante nuestra oferta empresarial?
  • ¿Se ha estancado el número de clientes?
  • en cuanto a los procesos de producción, ¿cuáles es su nivel de eficacia y calidad?
  • ¿cuál es el grado de eficiencia del personal que trabaja en la empresa?

Con los datos recopilados durante el proceso de diagnóstico, se podrá elaborar un plan estratégico de acción a corto o medio plazo.

Análisis DAFO y estrategias

A través del análisis DAFO se analiza la situación actual del negocio. Una vez obtenidos los resultados se podrán tomar las decisiones estratégicas más adecuadas para la empresa.

Se divide en dos partes:

  • Análisis interno. En esta fase se estudian las fortalezas y debilidades de la empresa.
  • Análisis externo. En este caso se analizan tanto las amenazas como las oportunidades que tiene la empresa en el mercado.

Con los resultados obtenidos tras el análisis podrás establecer las estrategias más adecuadas para tu empresa.

Tipos de estrategias

  • Estrategias ofensivas. El objetivo de las mismas es sacar el máximo partido de las fortalezas de la empresa. Son estrategias de crecimiento en las que se busca aprovechar todas las oportunidades que brinda el mercado.
  • Estrategias defensivas. Perfectas para las empresas con un alto potencial interno pero situadas en un entorno lleno de amenazas. Lo que se busca con ellas es reducir el impacto de un posible ataque de los competidores aprovechando al máximo las fortalezas internas. No se trata de aumentar la ventaja competitiva del negocio, sino de conservarla.
  • Estrategias adaptativas. Se utilizan cuando la empresa tiene numerosas debilidades a nivel interno pero el mercado al que pertenece le ofrece un buen número de oportunidades. Para que este tipo de estrategias tengan éxito es preciso realizar todos los cambios internos que sean necesarios para que el negocio pueda aprovechar todas las oportunidades que le brinda el entorno.Un buen ejemplo es el de las empresas que no disponen de recursos financieros suficientes para desarrollar su producto o servicio con éxito. Para mejorar su situación deben acudir a fuentes exteriores de financiación. Las plataformas digitales como Finanzarel son una excelente solución.
  • Estrategias de supervivencia. Perfectas para aquellas empresas con importantes debilidades internas y que se sitúan en un entorno hostil lleno de amenazas. El objetivo de este tipo de estrategias es el mantenimiento del negocio dentro del mercado a través del establecimiento de mecanismos de defensa ante las amenazas.Ejemplo. Si una empresa ha perdido clientes frente a sus competidores lo más adecuado que debe hacer es establecer estrategias de fidelización que le permitan revertir la situación desfavorable en la que se encuentra.

¿Has realizado ya el diagnóstico de tu empresa? Recuerda que este análisis debe hacerse de forma periódica. 

 

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