El mercado nacional empresarial está compuesto mayoritariamente por pequeñas y medianas empresas y curiosamente estas son las que más peligran en cuanto a supervivencia y/o fracaso en su actividad. Esto quiere decir que una gran parte de pymes se encuentran de forma habitual con problemas de tesorería, en parte debido a un mal cálculo en la gestión de sus flujos de caja.
2 Principales motivos de fracaso empresarial
Resulta sorprendente el alto volumen de pequeñas y medianas empresas que no sobreviven a los dos años de actividad. Si analizamos los principales motivos de su cierre veremos que se ciñen a los siguientes:
1- Escasa demanda para el producto o servicio que ofrecen; todos hemos conocido o escuchado ideas que en un principio parecían fantásticas pero que cuando se lanzan al mercado no son bien acogidas por el público. La mayoría de las veces es porque no satisfacen las necesidades de los clientes o simplemente no existe un interés real en el mercado para este nicho.
2- Ausencia de recursos financieros que garanticen el funcionamiento ordinario de la actividad; resulta sorprendente ver como una gran cantidad de pymes se ven obligadas a cerrar sus puertas a pesar de contar en ocasiones con un alto volumen de demanda y/pedidos. ¿Cuál es entonces el problema? La falta de recursos financieros y un inexistente plan de tesorería.
La primera de las causas se rige por la ley de la oferta y la demanda por lo que poco podemos hacer para evitarlo pero la segunda es algo en lo que podemos intervenir mediante un buen plan de tesorería y gestión del flujo de caja.
4 Claves para optimizar tu plan financiero y evitar tensiones de tesorería
1- Haz una radiografía de tu cliente potencial
Es importante saber a quien vendemos o vamos a vender nuestros productos o servicios. La gestión de cobro si nuestra empresa es B2C suele ser inmediata ya que facturamos al cliente en cuanto realizamos la venta o prestamos el servicio. El enfoque cambia si somos una empresa B2B, ya que nuestros clientes potenciales serán también empresas a las que tendremos que ofrecer alternativas atractivas de facturación para convertirlas en clientes. Es en este punto en el que se producen la mayor parte de las tensiones de tesorería porque se suelen entregar los productos y prestar los servicios bastante tiempo antes del cobro (30, 60, 90 días).
2- Establece normas de emisión de facturas y recepción de cobros
En ocasiones ocurre que las empresas se centran más en la captación de clientes y la entrada de nuevos pedidos que en clarificar y gestionar las condiciones de cobro y es entonces cuando pueden surgir las tensiones de flujos de caja. ¿De qué sirve recibir órdenes de pedidos si no contamos con cash para fabricarlos o comprar materias primas?. Existen programas de gestión en la nube que facilitan el proceso de emisión y pago de facturas.
3- Ofrece medios de pago que agilicen el cobro
Es importante ofrecer a los clientes diferentes medios de pago que agilicen la transacción. Hoy en día gracias a las empresas fintech contamos con múltiples herramientas que facilitan los pagos de forma casi inmediata. Operaciones de confirming, descuento de pagarés, anticipo de facturas, son algunas de las opciones digitales con las que cuenta cualquier empresa para adelantar sus cobros. Por otra parte es importante priorizar la gestión de facturas impagadas para reclamarlas en la mayor brevedad posible ya que la mora implica una carga y también un freno en el desarrollo de la actividad. Otra alternativa es ofrecer a los clientes interesantes descuentos por pronto pago. Una recompensa que premia y motiva a los clientes a pagar antes.
4- Planifica de los flujos de caja
Dentro del plan de recursos financieros con los que cuenta la empresa se debe incluir una solución para gestionar correctamente la tesorería. Es importante mantener la situación de los flujos de caja actualizada de tal forma que transmita la realidad de la empresa. En muchas pequeñas empresas no existe la figura de un profesional financiero que gestione estos recursos, sin embargo, es un servicio que se puede externalizar o contratar a través de una herramienta de software que facilitan previsión de flujos de caja y planificación de necesidades.
Las nuevas tecnologías mediante servicios fintech han supuesto un excelente recurso financiero para la optimización de un plan de tesorería en las pequeñas y medianas empresas. Consiguen eliminar tiempos de espera, comisiones abusivas sin la necesidad de garantías ni consumo de CIRBE y lo más importante, resuelven los problemas de liquidez provocados por la diferencia entre el tiempo de emisión de la factura y su cobro.
Contar con recursos financieros flexibles que se adapten a la actividad ordinaria de la empresa contribuye al desarrollo y crecimiento de cualquier pequeña y mediana empresa.